Mandarte una carta sin dirección , para que me encuentres

Un día marcado y una noche cálida. Un segundo asalto ahora que todos nuestros amigos se han ido. Una foto y dos razones. Quedarme por ti y que te marches. Hacerte gritar con la mirada. Hacerte callar respirando. Colgarme de tu piel. Descolgarme de tus telarañas. Romperte tus esquemas, arreglarte. Encontrar la regla que nos defina. Mandarte una carta sin dirección, para que me encuentres. Matarte a besos y revivirte a cosquillas. Hacer una cueva en tu colchón para que nadie nos encuentre. Son más de las tres. Y te sigo odiando igual que la primera vez. Te odio, te odio, te odio. Y te quiero más que el primer día. Te quiero, te quiero, te quiero. Sedarte con mis canciones, y terminar debajo de las mantas. Reventarte a suspiros, y terminar perdidos.